Reducir el impacto de los medios de transporte contaminantes que afectan a la salud de las personas; hacer viable la incorporación a la gestión pública de nuevos servicios como, por ejemplo, el transporte urbano; implantar sistemas de recarga eléctrica; e instaurar nuevos modelos de movilidad compartida que interconecte, especialmente, el centro urbano con el campus universitario y el resto del diseminado de la población, serán los ejes que conformarán este lineamiento estratégico.

Resulta evidente que el transporte tradicional causa problemas que impactan sobre el medio ambiente, los recursos naturales y la calidad de vida de las personas. La alternativa es la llamada ecomovilidad o movilidad sostenible, que fomenta y promueve el uso de transportes eficientes, responsables, ecológicos y sostenibles con la protección del medio ambiente. En este sentido, hay que insistir que este tipo de movilidad no se limita solo a caminar, ir en bicicleta y usar el transporte público, es también la relación entre los diferentes sistemas de movilidad que respetan el entorno y mejoran la calidad de vida.

Por todo lo anterior, con este lineamiento se persiguen los siguientes objetivos de sostenibilidad, eficiencia y ahorro:

• Reducir el impacto de los medios de transporte contaminantes que afectan a la salud de las personas.

• Fomentar el uso de transportes ecológicos como la bicicleta y vehículos eléctricos. 

• Promover un estilo de vida saludable y sostenible, mejorando la salud física y psicológica de las personas. 

• Reducir los problemas que causan los combustibles fósiles y gases de efecto invernadero, evitando el calentamiento global y el cambio climático. 

• Fomentar las energías renovables y la tecnología ambiental, promoviendo la eficiencia energética. 

• Reducir el tráfico, ahorrando dinero con el uso por parte de los servicios públicos de estos medios y lograr, por tanto, una ciudad más limpia y una mejor calidad de vida. 

En el estudio “Ideas y buenas prácticas para la movilidad sostenible” realizado por Ecologistas en Acción y financiado por el Ministerio de Medio Ambiente, expresa que “toda actuación que pretenda reorientar la movilidad hacia un enfoque sostenible pasa por dos objetivos distintos pero complementarios y necesariamente simultáneos: disminución del uso del automóvil privado y fomento de los transportes y servicios públicos no motorizados”.

Aun con las evidentes diferencias en cuanto a tamaño y población, es importante estudiar las experiencias en este sentido de las principales capitales europeas y, adaptándolo a las circunstancias y tamaño de Puerto Real, poder imitar modelos exitosos. En este sentido se mencionan las siguientes experiencias:

• Estocolmo, para promover el uso de vehículos eléctricos en usuarios que no disponen de plaza de garaje, ha creado las llamadas charging streets, determinadas calles seleccionadas, con secuencias de al menos 10 espacios de aparcamientos en sus aceras, dotados de infraestructura de recarga.
• Ámsterdam, con red de recarga pública asumida por la entidad local, sacó en 2017 exitosamente a concurso la gestión de la operación de los puntos de recarga, siendo la primera vez en Holanda que una empresa privada se adjudicaba el servicio de operación de la infraestructura de recarga pública (complementando una cofinanciación previa del gobierno del área metropolitana).
• Oslo ha creado su propio operador de recarga e instalado más de 1.300 puntos de recarga de uso público desde el año 2008. Han evidenciado que la carga pública semi-rápida o rápida comienza a resultar viable económicamente, en áreas urbanas con más de 3% de cuota de mercado de vehículo eléctrico.

Si bien el fomento de nuevos modelos de movilidad basados en la explotación de las nuevas tecnologías es un objetivo de este lineamiento, no cabe duda de que asumir dicho modelo en la propia gestión de los servicios públicos del municipio, parece que sería una medida acertada, “evangelizadora” y, por supuesto, eficiente. Es por ello, que las actuaciones ligadas a esta línea estratégica tratarán de adaptar la movilidad funcional y operativa del municipio a los principios de la ecomovilidad y, más concretamente, a la movilidad eléctrica. Para ello será fundamental, no sólo adquirir vehículos eléctricos de todo tipo, sino, en coordinación con el resto de los lineamientos, hacer uso intensivo de las TIC para minimizar los movimientos o, cuanto menos, hacerlos de manera eficiente y sostenible.

Actuaciones

A un nivel alto y de forma simplemente enunciativa, se detallan las posibles actuaciones a desarrollar sobre este lineamiento estratégico sin menoscabo que puedan añadirse otras. El detalle de estas actuaciones se concreta en las fichas de proyecto anexas a este documento estratégico:

• Adquisición de vehículos y maquinaria funcional de tipo eléctrica e incorporarla en la operación de los principales servicios públicos de la localidad.
• Analizar y determinar la viabilidad de incorporar a la gestión pública directa el servicio de transportes urbanos dotándose para ellos de autobuses eléctricos. En esta misma actuación, se pretende analizar la incorporación, mediante pilotos con centros de investigación en la materia, de microbuses semiautónomos que puedan circular por el centro de la localidad (muy apropiado por su configuración para este tipo de vehículo), y conectar, a su vez, el centro con el campus universitario.
• Teniendo cercanas las experiencias de ciudades y empresas que han implantado modelos de movilidad compartida (motosharing / patinete eléctrico compartido), se realizarán proyectos y estudios que analizarán la implantación, desde lo público, bien sea a través de un acuerdo de marca blanca o bien por explotación directa, de líneas de movilidad compartida utilizando bicicletas, patinetes o motocicletas eléctricas.
• Implantar y explotar un sistema de puntos de recarga eléctrica rápida que, por un lado, fomente el uso del vehículo eléctrico y, por otro, hagan sostenible el modelo de movilidad sostenible que se pretende implantar. Para ello, con la colaboración de EPRESA Energía y Comunicaciones, se estudiará la viabilidad de su operación y mantenimiento.